Por Colectivo ARCIÓN
Introducción
En toda sociedad existen normas de carácter moral, cultural y jurídicas que establecen límites a las conductas de las personas y las infracciones son castigadas por el Estado. Las conductas antisociales que atentan contra el bien jurídico protegido de la libertad sexual, donde la víctima es atacada en su persona y dignidad, tomada por la fuerza, son repudiadas por la magnitud del daño que representan.
Los delitos sexuales pertenecen a la categoría de crímenes tipificados en la ley más delicados y a la vez son los más frecuentes en México. Cada día éstos representan el mayor número de delitos contra la libertad sexual y el normal desarrollo psicosexual, afectando no sólo a la víctima sino atemorizando a la sociedad, por lo que en la actualidad ya son un problema con límites inalcanzables.
Por crímenes sexuales se entienden los delitos tales como: hostigamiento sexual, abuso sexual, estupro, violación y rapto.
El bien jurídico tutelado que la ley protege es la libertad sexual. El presente estudio abordará específicamente el delito de violación, analizando el modus operandi del victimario para poder estudiar su perfil conductual y saber cuál es su personalidad y los trastornos que hacen que una persona adopte este tipo de violencia.
Para conocer el perfil de un violador confeso se analizarán algunos casos, aunque muchos autores consideran que no se puede tener un patrón de conducta en el comportamiento social; sin embargo, al estudiar una conducta en particular es posible identificar rasgos de la personalidad similares entre los victimarios, por ejemplo, la frialdad emocional, el egoísmo, la intolerancia, la capacidad de seducción, esto con el fin de obtener los factores criminológicos que forjaron a la persona, como su medio social, familiar y cultural.
En general, los delincuentes demuestran que son más inteligentes de lo que aparentan, pues tienen muy estudiada la habilidad de manipular a quienes los rodean.
Quienes pertenecen al entorno familiar del violador en muchas ocasiones no se percatan de la personalidad agresiva-violenta sexual, es así que éste logra pasar inadvertido entre la familia y amigos, además de que posee la capacidad para ocultar sus intenciones de agredir sexualmente.
El presente estudio aborda un tema muy común dentro de la sociedad: la violación. Para esto se inicia dentro del marco legal, el cual describe los preceptos legales que sancionan dicho delito, asimismo los elementos que lo conforman. Se analiza la personalidad y los trastornos en los que recae la responsabilidad desde el punto de vista de la criminología clínica del actuar del victimario, de igual forma se estudian detenidamente los indicios y evidencias.
Marco jurídico
En toda sociedad existen límites a las conductas de las personas buscando un Estado de derecho que no trasgreda la paz social. Para fijar un límite a las conductas se establecen leyes dentro de cierto marco jurídico, en particular este estudio se basará en el Código de Defensa Social del Estado de Puebla, que en su capítulo Undécimo habla de los delitos sexuales.
Por ‘delitos sexuales’ se entiende toda conducta típicamente antijurídica y culpable que constituya una trasgresión a los bienes jurídicos tutelados: “libertad e integridad sexual”. Y dentro del capítulo en su sección tercera nos habla del delito de violación.